Este post no hablará de innovación. Aunque Ángel Fernández Santos revolucionase y engrandeciera la crítica cinematográfica en español. Hoy me he enterado que ha muerto. Y bien que lo lamento. Este grandísimo, con todas las letras, crítico, extraordinario guionista y gran columnista (tengo guardada una columna que escribió sobre la película Laura que es antológica), me enseñó, a través de sus artículos y crónicas festivaleras, a entender, valorar y degustar el buen cine. Sin medias tintas, áquel que emociona. Ya no escribirá más, pero ahí quedan sus escritos, a los que uno recurrirá siempre que pueda. Porque el talento de los grandes perdura siempre en el recuerdo. Por mucho tiempo que pase. Descanse en paz, maestro. Este es mi pequeño homenaje.